Análisis de riesgos en el transporte. Desarrollo de herramienta metodológica y protocolos. Embalaje Inteligente
En el mundo de la distribución y en concreto en el ámbito de los embalajes coexisten numerosos aspectos a considerar, y muchas veces contradictorios entre sí. Así pues además de requerir el aspecto básico que es el de proteger al producto, para lo que debe soportar los distintos esfuerzos y ambientes higrotérmicos que se puedan presentar en su distribución, que por cierto cada vez se presentan ciclos más largos, lo que va incrementando el uso de embalaje. Por otro lado las presiones medioambientales, y la cada vez mayor conciencia social sobre el impacto negativo de los residuos, demandan un menos uso de materiales de embalaje, o soluciones más sofisticadas para mantener la protección con menor uso de materiales.
La logística, cada vez más automatizada, y con operaciones más tensas en la manipulación y almacenaje, introduce también necesidades y requerimientos hacia el embalaje. Además el vertiginoso avance de las tecnologías de la información y comunicación, permiten introducir innovaciones en el embalaje considerado también como elemento de comunicación y marketing, no solo del producto si no de la empresa también. Y claro todo ello, se debe atender al mínimo coste, por unidad o kilogramo de producto distribuido.
Queda claro que atender todas estas necesidades en un embalaje, requiere que en la fase de desarrollo o definición del mismo, proyecto que se debe acometer con carácter previo al lanzamiento de un producto al mercado, contrariamente a la práctica habitual de utilizar lo conocido y corregir después, se consideren de forma sistemática todos los requerimientos y se evalúen las distintas alternativas de desarrollo posibles.
De esto trata el proyecto Análisis de riesgos en el transporte: Desarrollo de herramienta metodológica y protocolos, que consiste pues en identificar todos los factores de riesgo para el producto en su distribución, así como las necesidades de las distintas partes interesadas en el proceso de distribución, como son cliente final, distribuidores, transportistas, fabricantes, sociedad en general y sin perder de vista los aspectos de sostenibilidad e impacto ambiental.
El resultado final del mismo es el desarrollo de herramienta metodológica para acometer proyectos de ingeniería de embalaje, considerando todos los inputs necesarios, utilizando librerías con soluciones y materiales disponibles, realizando el proceso creativo de forma multidisciplinar y lo más ágil posible, y evaluando conformidad de resultados, de forma que se obtenga el embalaje más idóneo, con menor coste, menor impacto ambiental y en el menor tiempo posible.
En estas condiciones todos ganan.
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